Love in War (Cap 8)

Los dos hombres peleaban sin parar, no daba distinguido quien eran, estaba agotada y muy mareada y inconscientemente me desmayé pero unas manos me sujetaron impidiendo que cayera al suelo. Pronto otro hombre se unió a la pelea, el viento era horrible y no favorecía para nada a los luchadores. Intentaba distinguir a los hombres y pronto me di de cuenta de que uno era Xiumin, sí era Xiumin estaba segura y el otro... Chen, era Chen, mi amado Chen. Tenía tantos sentimientos dentro de mí que estaba completamente confundida, quería ir ahí y pelear con ellos y sobre todo quería sacar a Chen de ahí, no soportaría que Joon le hiciese daño, pero apenas me daba movido menos mal que me sujetaba Lay, ¿porque era Lay quien me sujetaba, no? me dijo algo en chino y ahí reconocí que era Lay. Ahora estaban ellos allí, estaría a salvo supongo. Chen y Xiumin reduciron a Joon y decidieron atarlo a un árbol. Los brazos de Chen me envolvieron en un dulce abrazo que yo no pude corresponder debido a lo destrozada que estaba. Se escucharon unos disparos a lo lejos y unas voces gritando y llamando por Joon. Salimos corriendo lo más rápido que pudimos, Chen me llevaba de la mano y yo tropezaba y me caía cada dos por tres. Estaba completamente agotada, apenas me podía mantener de pie y menos correr pero Chen tiraba de mí y no permitía que me deteniera en ningún momento, pronto escuchamos a gente corriendo detrás nuestra y disparando. Lo único que veíamos era árboles y más árboles, yo intentaba hacer memoria y recordad algo pero todo era desconocido, no tenía ni idea de donde estábamos hasta que me parecieron conocidos algunos caminos, me paré en seco.

         - Charlotte no te pares o nos alcanzaran - me dijo Chen tirando de mí

         - Reconozco estos sitios tenemos que ir por ahí - dije débilmente

No dudaron ni un segundo y siguieron mis ordenes, llegamos al lugar donde habían muerto Tao y Luhan y ahí estaban sus cuerpos descompuestos, no era muy agradable de ver pero atravesamos ese lugar y seguimos corriendo hasta una montaña que estaba llena de cuevas bastante profundas y la mayoría sin salida pero había una que yo conocía bien, allí mi padre nos escondió a mi y a mi madre para que no nos hicieran daño. Teníamos que pasar por una ladera al borde de un precipicio, pasamos con el más mínimo cuidado sin intentar no resbalarnos, llegamos al otro lado y allí había un pequeño agujero le indiqué a los chicos que se metieran y nos quedamos allí. No era un espacio muy grande pero cogíamos los cuatro perfectamente, el suelo estaba hecho de piedras y contra la entrada estaba lleno de hielo, el techo era desigual alto y bajo en distintas zonas. Xiumin fue a examinar la zona, Chen se quedó en la entrada vigilando.

        - Chen ven aquí, toma - dije dándole la navaja que llevaba conmigo - dile a Lay que me quite las balas con esto

        - ¿Estas loca? Te puede hacer daño

        - Me da igual, si no me quita las balas será peor, vamos díselo

Chen le transmitió el mensaje a Lay que negó al principio pero finalmente aceptó. Me quité la camisa y me tumbé, Lay se acercó cuidadosamente a mí y observó las heridas, se quedó varios minutos pensando que hacer hasta que decidió intentar quitarme la bala del hombro,

 dolía demasiado y las ganas de gritar se acumulaban pero no quería ya que sino nos descubrirían, mordí mi camiseta y aguantaba los gritos, las lágrimas salían de mis ojos pero me di de cuenta que no era yo la única que lloraba. El dolor que sentía era indescriptible, Lay intentaba ir despacio pero lo único que conseguía era hacerme más daño, después de dos minutos de dolor intensos la bala salió y Lay me ató un trozo de tela de su chaqueta al hombro, hizo lo mismo con las otras dos heridas y cuando terminó, me vestí y sin poder evitarlo me dormí.

Desperté de noche por el frío y me incorporé, aún me dolían las heridas, distinguí a Xiumin durmiendo al lado de Lay y a Chen durmiendo cerca mía, me tumbé a su lado y me dormí abrazada a él. 

A la mañana siguiente me desperté y Xiumin y Lay estaban discutiendo, Chen se despertó unos minutos después, me dio un dulce beso en la frente.

      - ¿Que tal has dormido? ¿Te duelen mucho las heridas?

      - Bien, ya estoy un poco mejor

Chen se levantó y fue hacía Xiumin y Lay y comenzaron a hablar. Mientras yo me puse a pensar como salir de aquí, lo que teníamos que hacer es salir de corea el problema era como.

     - ¿En que piensas? - me dijo Xiumin sentándose a mi lado

     - En como salir de aquí, tengo un amigo que pilota helicópteros y nos podría sacar fácilmente de aquí pero no tenemos con que llamarlo además se iba a luchar al sur, no sé ni si estará muerto.

     - ¿Y si conseguimos un teléfono y si está vivo nos sacará de aquí? - me preguntó Xiumin

     - Sí, seguro que sí, me debe un favor pero es imposible conseguir un teléfono

     - ¿Y si tiene uno alguno de los hombres que mataron a los otros?

     - No, los registré yo cuando estuve allí, no había nada

     - ¿Entonces como conseguimos uno? - dijo Chen uniéndose a la conversación

     - Pues no sé tal vez lo mejor sería ir a Seúl y conseguir uno pero es bastante arriesgado, ya que fijo que las tropas norcoreanas han ido ahí a buscarnos, así que será complicado llegar. 

De pronto escuchamos una explosión tremenda y unos gritos, nos asomamos pero sin salir del escondite.

         - Charlotte sal de tu maldito escondite o me lo cargo - decía el general Jung Daehyung, apuntando a Joon con un arma mientras él estaba arrodillado y atado - Vamos no seas cobarde sal de una puta vez o te juro que disparo, lo mato, lo mato ahora mismo, si alguna vez te ha importado sal de tu escondite. Te doy tres segundos UNO... DOS... Y... TRES.